¿Qué tipo de iluminación es más saludable para la vista?

Iluminación más saludable

Si te preocupa tu salud ocular, es posible que tengas inquietud por conocer qué tipo de luz es más saludable para la vista. En la siguiente guía te lo desvelamos, para que lo tengas en cuenta para tu despacho o los distintos habitáculos de tu trabajo o vivienda. ¡Puede que descubras cosas que no conocías!

Guía | La iluminación más saludable para la vista: ¿cómo conseguirla?

¿Sabías que no todas las personas tienen una iluminación óptima en casa para trabajar? En muchas ocasiones, los problemas en la vista empiezan por aquí. A continuación, te damos una serie de tips para que tengas una iluminación perfecta en casa y puedas trabajar en buenas condiciones.

La luz natural, siempre la mejor opción

La realidad es que la luz natural es la mejor amiga de la vista. Como bien indica su nombre, es la luz que tenemos en el día a día y que cambia en función de si hay sol o hay sombra. Pero sin duda es la luz con la que nos sentimos más cómodos y que daña menos la visión.

En el caso de que planees montar una oficina o despacho en un local o bien en tu casa, es importante que trates de situar la mesa cerca de una ventana. De esta forma, tendrás buena dosis de luz natural cada día.

Al tener luz natural, no solo vas a forzar menos la vista, sino que también ahorras dinero, dado que no tendrás que tener todo el día la luz encendida. Quieras que no, supone un importante ahorro en la factura de la luz todos los meses.

Por este motivo, si tienes la posibilidad trata de elegir siempre luz natural. No siempre se puede elegir, pero no te preocupes porque existen alternativas.

¿Qué orientación es mejor para una casa?

En el caso de montar un despacho en casa, la mejor orientación es la norte. Esto es debido a que le entra luz todo el día, pero los rayos solares no inciden directamente, con lo cual la luz no te molesta ni en tus ojos ni en la pantalla.

La luz puede estar muy bien. Sin embargo, resulta desagradable trabajar si te da el sol en los ojos, porque no verás absolutamente nada y estarás muy incómodo. Por eso es importante encontrar un término medio, un equilibrio.

En ese caso, lo ideal consiste en tener luz natural y orientación norte.

¿Y si no hay luz natural? ¿Qué luz artificial elegir?

Por supuesto, no siempre se puede tener luz natural. Eso no quiere decir que no puedas tener tu despacho en una habitación interior, porque por supuesto se puede hacer.

De hecho, si piensas en cómo son las oficinas, muchas tienen la mesa al lado de una ventana, pero no todas. Al fin y al cabo, hay muchas mesas situadas en la parte central y que no reciben nada de luz natural.

Pero lo que sí tienen en común buena parte de las oficinas, si te fijas, es el tipo de luz natural. Por lo general, siempre se eligen luces frías.

La luz artificial fría es la mejor alternativa a la natural, debido a que es la que más se le parece. Cansa menos la vista y hará que la habitación se vea de un color muy similar al de la luz natural, con lo cual verás que no te molestan los ojos y estás a gusto.

¿Cómo es la luz artificial fría?

Se caracteriza por tener un color más blanco. La luz cálida es más amarilla y la fría es más blanca. De hecho, evoca la creatividad y te mantiene despierto, para estar más atento y trabajar más concentrado. La luz cálida te puede relajar más (es ideal para irse a dormir).

Normalmente, se considera luz fría a partir de 4.500K. Sobre todo si hablamos de 5.000 o 6.000k, dado que se considera una luz bastante fría.

En el caso de que busques algo intermedio, puedes ir hacia los 3.500 o 4.000k. La luz cálida ronda los 2.000k, para que te hagas una idea de las opciones a elegir en función de lo que necesites.

El caso es que te sientas cómodo y no tengas molestias al trabajar o al leer un libro. Por eso decimos que cada persona tiene sus necesidades.

¡Nunca trabajes sin luz!

Lo que debes es evitar trabajar sin luz. Hay personas que por ahorrar luz prefieren trabajar a oscuras, pero esto puede llegar a ser muy peligroso.

La luz de la pantalla es muy fuerte y te puede causar molestias y sequedad ocular, con sus terribles consecuencias. Por ello, es mejor que bajes el brillo de la pantalla y subas la luz en la habitación. Es decir, que tengas más luz en general.

TIP para trabajar por la noche: luz cálida

Hay personas que son más creativas durante la noche. Evidentemente, de noche no hay luz natural, con lo cual se necesita tener luz artificial.

Sin embargo, por la noche la luz fría puede ser muy agresiva. Puede que te desvele o que te cause insomnio, dado que tiene el efecto de la luz natural: te ayuda a despertar. Por eso, si lo prefieres de noche puedes tratar de tener una luz más cálida.

Si tienes un despacho, puedes tener la luz principal fría y luego tener un flexo con luz cálida. Así podrás alternar un tipo de luz u otro en función de si es de día o de noche. Es una solución económica y responsable, porque podrás cuidar la vista y trabajar en cualquier momento del día, sin que la luz sea un problema.

Las tiras LED en color cálido también son tendencia como alternativa al típico flexo de luz cálida. En cualquier caso, también puedes probar y elegir la opción que más se ajuste a tus necesidades. Al fin y al cabo, cada persona es un mundo.

Esperamos que estos consejos te sean de gran ayuda para trabajar con una buena iluminación y cuidar de la vista al mismo tiempo.

No dudes en ponerte en manos de Óptica Hispania. ¿Te ha quedado alguna duda?

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